Latice - Latinamérica en el Centro

-

La Selva no se vende, la selva se defiende

La Selva no se vende, la selva se defiende
Imagen: Ivan Lira

Cecilia Bergstrand
LatiCe

El 11 de junio se realizó una jornada masiva de protesta en todo Perú en apoyo a los pueblos originarios de Amazonía. La gente exigía, entre otras cosas, que el Congreso derogue los dectretos de ley que viola los derechos colectivos de los pueblos originarios. La respuesta del gobierno fue opresión y lagrimógeno.

Miles de personas manifestaroneste día en Lima y en Europa también se realizaron manifestaciones en Bruselas y Roma, entre otras ciudades.

La concovación salió de los sindicatos, organizaciones campesinas, trabajadores agrícolas y los pueblos originarios.

Al mediodía se cerró La Plaza de Armas en Lima con barricadas de metal y policia armada que después se fueron esparciendo a lugares estratégicos para parar a los manifestantes. A las tres de la tarde se dio la orden de dispersarlos con lagrimógenos a pesar de que se encontraban cerca de las partes centrales de Lima.

Por todo el país se realizaron manifestaciones. En Iquitos, Yurimaguas, Arequipa y Puno entre otros lugares.

En la ciudad de Bagua Grande, capital de la provincia de Utcubamba en Amazonas, habían pensado empezar la jornada de protestas con una misa en memoria de los civiles que murieron el viernes 5 de junio pero fue imposible. El ejército cercó la Iglesia de Santiago Apóstol y impidió la pasada de los visitantes. Por altavoz se les imformó que no se podía garantizar su seguridad y que no estaba permitido reunirse nisiquiera para una misa.

El día anterior El Ministerio de Transporte y Comunicaciones y la policia cerraron tres emisoras de radio. Varios periodistas en una de ellas, Radio La Voz, luego recibieron llamadas amenazadoras diciendo "ya llegamos" y "ahora te toca".

En Pucallpa cerca de 2 000 indígenas bloquean un aceso del río Tamaya y impide de esta manera el tránsito en el río Ucayali. En San Martín todavía están los indígenas en la carretera Tarapoto-Yurimaguas. Ahora recibieron ayuda médica y de alimentos de personas particulares y organizaciones locales.

Un día después de que el Congreso suspendió los decretos que han sido cuestionados por los pueblos originarios el gobierno designó un grupo de trabajo para poder iniciar un diálogo. Según Yehude Simón, lo integrarán los presidentes regionales, el gobierno, los jefes de diferentes grupos en Amazonas, Defensa Popular, la Iglesia Católica y la Evangélica.

Hasta ahora no se sabe cúantos indígenas murieron dentro de y al rededor de Bagua el 5 de junio cuando fuerzas policiales atacaron un grupo de indígenas que bloquearon una carretera. Las cifras oficiales y las de los testigos no coinciden y varios cuerpos fueron trasladados.

Además más de sesenta personas siguen desaparecidos según la Asociación por Los Derechos Humanos (APRODEH) en la zona. Según la misma detuvieron a 133 personas y 189 fueron heridos y APRODEH afrima que las personas que se encuentran

encarceladas en el cuartel en El Milagro desde hace siete días no han sido formalmente detenidos.

En una reunión del Grupo Nacional de Coordinación por el Desarrollo de los Pueblos Amazónicos los presidentes regionales se comprometieron a encontrarse con las comunidades indígenas para que elijan sus representantes al grupo de trabajo. El objetivo es elaborar un plan de desarrollo para los pueblos originarios en Amazonas que priorizará cuestiones de propiedad, educación, salud y otras medidas necesarias.

Qué pasará con las votaciones futuras en el Congreso no está claro ya que varios congresistas han sido suspendidos. Una de ellas Juana Huancahuari, del Partido Nacionalista Peruano dice: "el presidente Alan García se comporta como un tirano" y "no tiene capacidad de gobernar en democracia".

Los demás congresistas suspendidos – la mayoría de pueblos originarios – son: Yaneth Cajahuanca, Cayo Galindo, Nancy Obregón, María Sumire, Hilaria Supa y Rafael Vásquez.

Alberto Pizango, líder de AIDESEP, que solicitó asilo en la embajada de Nicaragua ya se enteró bajo qué condiciones le darán el salvo conducta. Tiene que contestar una serie de preguntas de parte de un fiscal. Pero según la ley peruana nadie está obligado a contestar este tipo de preguntas.

Espero que Alan García sienta tanta presión nacional e internacional que se vea obligado a aceptar que el desarrollo de Amazonas se produzca bajo las condiciones de los pueblos originarios y con todo respeto por los que viven en aislamiento voluntario.

Cómo va a solucionar el problema de los más de cien contratos que ya se firmaron es otra cosa. Pero eso pasa cuando uno regala algo que no le pertenece.

Fuentes:
Dagens Nyheter
www.servindi.org
Radio La Voz

Publicado: junio 2009

Más artículos de: Cecilia Bergstrand, LatiCe

  • LatiCe är en ideell förening med org. nr.802440-4512 |
  • © 2008 LatiCe