Mujer con discapacidad en Nicaragua
Las mujeres con discapacidad son hoy escuchadas y respetadas, tienen autoestima, cuentan con una familia, son profesionales, madres, esposas, dirigentes, empresarias, deportista, artistas y tienen sus propias organizaciones, ya nadie habla por ellas porque son personas con derechos en igualdad de condiciones.
Foto: Ulma Prado Esquivel, presidenta
de la organización de mujer con
discapacidad por un futuro sin barreras
La joven Ulma Prado Esquivel, presidenta de las mujeres con discapacidad por un futuro sin barreras de la Ciudad de Chinandega, con una sonrisa, bien segura y empoderada, me dice que ella es una mujer con derechos pero, ante todo, un ser humano y que su mayor discapacidad no es andar en una silla de rueda, sino aquella que le da la sociedad, por la manera en que la tratan, por la falta de acceso a los servicios públicos, la falta de movilidad en la ciudad. Ella es, no obstante, una mujer capaz de dirigir, organizar y trabajar porque tiene capacidades, cualidades, habilidades y talentos para impulsar y hacer realidad cualquier proyecto. Concluyó afirmando que ella, sobretodo, es mujer, o sea, un ser humano capaz de trabajar, estudiar, recrearse, tener hijos, tener una familia y tomar las decisiones que atañen a su propia vida. Por consiguiente, es una miembro activa de la sociedad.
Ulma me cuenta que su organización cuenta con más de 120 miembros y que la mayoría son mujeres jóvenes, ya que la organización da prioridad a este sector. Ellas son un grupo de mujeres que se dedican a la decoración y las manualidades y, aunque cuentan con su propia empresa de manualidades, deben enfrentar muchas dificultades porque se les obstaculiza movilizarse por Chinandega en donde no hay rampas ni estacionamientos o servicios higiénicos apropiados. Sin embargo, nada de esto ha constituido un impedimento para que se organizasen.
Foto: Marisol Juárez trabaja en
lavandería en el restaurante Gorrioncito
En conversación con muchas mujeres organizadas y no organizadas, como la joven Marisol Juárez, descubrí que ellas valoraron la posibilidad de capacitarse ya que esto les permite empoderarse y elevar su autoestima. Reconocen que son mujeres con derechos humanos, que pueden insertarse a la vida social, cultural, política y laboral.
Carolina Torres Dirigente y Vicepresidenta de FEMUCADE (federación de mujeres con discapacidades) comenta que hay mucho por hacer y señala que algo interesante es que hoy las mujeres con discapacidad cuentan con un espacio de participación desde el pueblo ya que el presidente ha mandatado a los funcionarios del gobierno, desde ministros, diputados, delegados municipales y departamentales, a prestar especial atención a este sector. Por eso se cuenta con un espacio de participación en el estado nicaragüense, tanto a nivel local y nacional, a través de los gabinetes del poder ciudadano. Aún queda mucho trabajo por realizar, por ejemplo, que se inserte a las mujeres con discapacidad en el plan de desarrollo económico, político y social de la nación como sujetas de derecho, o que se las incluya en programas de vivienda o en el sector laboral.
Foto: Ruth López secretaria
adjunta del Gabinete del Poder
Ciudadano
La señora Ruth López, secretaria adjunta del gabinete del poder ciudadano, con mucho orgullo comenta que ahora se siente muy satisfecha por el reconocimiento y el respeto que hay por las mujeres con discapacidad y por el apoyo que reciben del presidente Daniel Ortega y de la compañera Rosario Murillo, ya que han mandatado a todos los funcionarios del gobierno a brindar atención especial a este sector. Dice que se visibiliza apertura en todas las instituciones y que los alcaldes de todo el país están priorizando al sector en sus proyectos. Expresa también que se han reunido con los alcaldes para que les mejoren la accesibilidad, tanto en la ciudad como en el campo, eliminando las barreras del entorno físico para facilitar la movilidad por las instituciones, que se conceda el subsidio para el transporte y centros de rehabilitación y recreación. Además el presidente Daniel se ha comprometido a brindar atención especial a las mujeres con discapacidad ya que las mayorías de ellas son madres solteras. Quieren también que se les garantice el acceso a la educación, a la salud, a la vivienda, a la rehabilitación y al empleo en condiciones de igualdad.
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