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La razón de los pequeños

Daniel Marrero
LatiCe

La razón de los pequeños
Foto: Javier Calvelo
Reunión entre vecinos para tratar el tema del monocultivo de soja trans-
génica, el viernes en la escuela de la zona de La Palmita, en el kilómetro 46
de la ruta 8, Canelones.

Desde hace muchos años existe en Uruguay y en Paraguay una situación de invasión de los grandes intereses de las multinacionales con el modelo sojero como escudo. Extraemos de la prensa del Sur del Continente dos ejemplos bien claros que muestran la resistencia a la agresión de nuestros días.

Mal que les pese a estos portentosos la conciencia ecológica está creciendo en Uruguay. Pasa que cada vez que nos asomamos a América latina y al Mundo descubrimos que los problemas de base son los mismos en toda la faz de la tierra. Expoliación de los recursos finitos, envenenamiento de la tierra y el agua, muerte por suicidios y expulsión de población campesina hacia centros poblados, por eso este artículo publicado por la Diaria de Montevideo, jamás dado a conocer en la "Gran Prensa". No creo que los productores sean tan retrógrados, ni tan empecinados, como para emprender una lucha contra"los molinos de viento" como lo hizo El Quijote, creo que es su propia subsistencia tal vez por eso en ocasión de Gobiernos de los partidos tradicionales comenzaran a denunciar la nueva invasión de productos transgénicos como por ejemplo soja NNR 1996 y maíces Mon 810, BT 11. De 2006 a la fecha la Asociación de productores orgánicos del Uruguay, junto a otras asociaciones gremiales del campo uruguayo, viene oponiendo resistencia a los monocultivos transgénicos. Recientemente se decretó en Uruguay por parte de la justicia ordinaria al departamento de Montevideo territorio libre de soja. Es el primer pronunciamiento de la justicia en torno a éstas cuestiones que ya están afectando gravemente a las familias rurales que se dedican a la horticultura, producción de miel, lechería y otros rubros tradicionales. Hace algunos días, en relación al desgaste de los suelos, el propio decano de la Facultad de Agronomía Ingeniero Fernando García hacía referencia al desgaste de los suelos con las plantaciones de soja. García lo ejemplificaba gráficamente con una comparación"(es) como un aerolito que cayó en Yucatán a nosotros nos cayó la soja y nos trajo problemas gravísimos". Por ende, el dinero rápido que producen éstos monocultivos, está afectando a las familias rurales, aumenta el precio de la tierra y, como en el caso de Palmita, se vende un tambo que daba trabajo para destinar esos campos a la producción sojera.

Pero les propongo adentrarnos a la realidad, en una pequeña localidad de Canelones Palmita que queda a escasos siete kilómetros de la ciudad de Atlántida, donde vecinos y vecinas están cercados por los monocultivos. La flamante alcaldía de Atlántida ha tomado una resolución rechazando los cultivos transgénicos"el monocultivo intensivo, a la utilización de pesticidas y herbicidas propios del modo de producción". Dicha resolución, presentada al intendente de Canelones Marcos Carámbula, hace pública la preocupación ante la contaminación de reservorios de agua potable y se cita como ejemplo la laguna del Cisne, de donde la comunidad se abastecen de agua potable. La resolución podría ser aplicada en todo el departamento de Canelones. Se suma así esta medida a la dictaminada por la justicia para el departamento de Montevideo. La resolución de Atántida hace referencia a otro problema subyacente: La tenencia de la tierra en manos extranjeras, otro gran tema no solucionado en nuestro país que afecta la soberanía territorial. Existe un proceso en marcha con las instituciones del Estado y con los organismos especializados. A nivel de instituto de colonización se han concedido hectáreas para el establecimiento de nuevos núcleos rurales- Esto es, sin embargo, insuficiente.

La clave del problema es que el Gobierno actual debe definir la política que se va a tomar con respecto a los grandes intereses de los agronegocios. Un Uruguay con un Nuevo perfil productivo, donde las familias rurales que siguen resistiendo todo tipo de adversidades quedándose allí, en el campo, y sin pasar a engrosar los "llamados cantegriles , villas miserias, callampas " que hay en toda Latinoamérica y que son producto del colonialismo y de las políticas neoliberales. Ya va siendo hora de plantearse de una vez por todas que la Reforma Agraria no sólo es posible, sino también necesaria, en nuestro país.

La larga lucha iniciada por nuestro José Artigas con su reglamento de Tierras dictado en 1811, la tenaz y larga lucha encabezada por nuestro Raúl Sendic y el legendario sindicato de cañeros de UTTA (que siguen batallando) marcó el camino de Norte a Sur en nuestro país, en material de reivindicaciones para los trabajadores del campo. Cabe entonces, a los gobernantes de turno a nuestro Frente Amplio, definirse de una vez por todas. Este tema es de vida o muerte para que la economía familiar rural subsista y se desarrolle, para repoblar la campaña, para generar puestos de trabajo y para alimentar toda la población la que hoy padece hambre a pesar de los programas sociales que se llevan adelante. No sirve la política del corto plazo en que se basa este modelo de producción que envenena y deja a la gente y animales sin el líquido elemento. Ya ha quedado comprobado en el departamento de Canelones donde la propia comuna tiene que asistir con agua a las familias víctimas de esta situación con recursos que salen de los bolsillos de los trabajadores. Es necesario que este modelo de producción sea desterrado de nuestro suelo porque atenta contra la naturaleza y va a terminar por acabar con los recursos naturales afectando gravemente a toda la región. Que "los lobis" de presión, no tan recién llegados y encabezados por la triste y tristemente famosa Monsanto, no inclinen más la balanza a favor de los que están conduciendo a nuestro planeta a un camino sin retorno. ¡No se puede estar bien con Dios y con el Diablo!

Nota: Agricultura familiar

La Comisión Especial para el estudio del uso del suelo rural en el departamento fue creada en el marco de la ley Nº 18.308 de Ordenamiento Territorial y Desarrollo Sostenible, que da potestades a los gobiernos departamentales para la categorización y uso de los suelos. La resolución departamental que dio origen a la comisión tuvo en cuenta la importancia de la agricultura familiar en Canelones, donde la mayoría de las producciones se realizan en campos pequeños, abarcando los rubros hortícola, frutícola, vitivinicultura, avicultura, apicultura, lechería, producción de cerdos y ganadería intensiva, entre otros, que son destinadas al consumo alimenticio de uruguayos, turistas y de exportación. Canelones es el departamento que tiene mayor número de habitantes en la zona rural.

La resolución considera que "en los últimos años se ha observado el avance de emprendimientos agrícolas extensivos que realizan actividades vinculadas a oportunidades coyunturales de mercados, utilizando con frecuencia tecnologías agresivas para la población y el ambiente, y compitiendo por el suelo con las producciones instaladas", y resolvió "fomentar políticas tendientes a preservar las características de Canelones en su modo de vida y trabajo familiar, su producción, su valor y su cultura, conservando el suelo como recurso estratégico del desarrollo, contribuyendo a la soberanía y seguridad alimentaria nacional, protegiendo la salud humana y el ambiente". La comisión está integrada por los directores de Planificación Territorial y Acondicionamiento Urbano, de Desarrollo Productivo, de Desarrollo Rural y Gestión Ambiental; participan también ediles departamentales, el director nacional de Ordenamiento Territorial, el director departamental del Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca, un representante de la Facultad de Agronomía de la Universidad de la República, productores y vecinos, Coordinadora de Organizaciones del Santoral y Noreste de Canelones, y vecinos de Cuchilla de Rocha (próximo a Sauce), quienes se movilizaron en 2008 ante la plantación de 350 hectáreas de soja transgénica en ese paraje. El cometido es asesorar al intendente.

Fuente: La Diaria Uruguay Septiembre 2010 Radio Mundo Real.

Como en el caso de la muerte del niño Silvino Talavera, también en Palmitas se han dado casos de intoxicación en población infantil Alerta, entonces. Escuchemos de paso el testimonio desde Paraguay, donde se habla bien a las claras de los riesgos que corre nuestra población.

27 de julio | Derechos humanos

El envenenamiento y asesinato de Silvino Talavera en Paraguay sigue impune. Los responsables del asesinato del niño paraguayo Silvino Talavera, los empresarios sojeros Hermann Schlender y Alfred Laustenlager, están libres aunque desde 2005 pesa sobre ellos una condena de cárcel de dos años por homicidio culposo. La familia de Silvino clama por justicia.



Publicado: octubre 2010

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